¿Cuántas veces te has repetido frases como estas?: “No soy lo suficientemente buena para cambiar mi vida,” “Tengo que ser una experta en todo para empoderarme,” o “Cambiar duele demasiado, prefiero quedarme igual.” Si alguna de estas resonó contigo, bienvenida al club de las mujeres que creemos que la transformación personal es un Everest imposible de escalar. La buena noticia: no lo es. La mejor noticia: puedes comenzar ahora mismo.
La mentira de la perfección Esa idea de que “tengo que ser una experta en todo para empoderarme” es como una trampa brillante: luce atractiva pero te mantiene atrapada. No necesitas saberlo todo. No necesitas tener todas las respuestas. Lo único que necesitas es estar dispuesta a preguntar: ¿Qué más es posible aquí que no estoy considerando? Esta pregunta nos invita a explorar desde la curiosidad, no desde la perfección.
¿Y si el dolor no es el enemigo? Cambiar duele, lo sabemos. Pero, ¿realmente duele o solo estás confundiendo lo desconocido con el sufrimiento? Cuando decimos “cambiar duele demasiado, prefiero quedarme igual,” en realidad estamos eligiendo evitar la incomodidad que viene con lo nuevo. Pero aquí está el giro: lo desconocido también es donde la magia sucede.
Pregúntate: ¿Qué sería posible si no resistiera este pequeño momento de incomodidad? La transformación no es un monstruo; es como una ola: puedes dejar que te revuelque o aprender a surfearla.
El temor de perderte a ti misma
“Voy a perder mi identidad si cambio.” Querida, ¿qué tal si la identidad que estás aferrada no es realmente tuya? Nos pasamos la vida cargando etiquetas que otros nos pusieron: “la fuerte,” “la buena,” “la que no puede fallar.” ¿Y si pudieras soltar esas etiquetas y descubrir quién eres realmente? Quizás, solo quizás, hay una versión de ti que está esperando ser elegida.
El mito de la comodidad
“Si no se siente cómodo, no lo hago.” ¿En serio? Entonces, dime, ¿cómo te funcionó esa estrategia hasta ahora? ¿Te trajo aquí, al borde del cambio, sintiéndote estancada? La verdad es que crecer no es cómodo, pero tampoco lo es quedarte en lo mismo. La diferencia es que la incomodidad del crecimiento te lleva a un lugar nuevo; la incomodidad de quedarte igual te hunde más.
La elección que cambia todo.
Lo he aprendido de Access Consciousness, que la elección crea. No necesitas esperar a sentirte 100% cómoda o lista. Solo necesitas elegir. Da un paso, aunque sea pequeño. Pregúntate: ¿Qué más es posible aquí que no he considerado? ¿Qué energía, espacio y conciencia puedo ser para recibir la transformación con facilidad, gozo y gloria?
Una invitación a lo desconocido.
Querida, el cambio no es tu enemigo. Tu miedo al cambio, sí. Y la buena noticia es que no tienes que hacerlo sola. Hay herramientas, hay preguntas, hay nuevas posibilidades esperándote. Este es el momento de soltar la necesidad de controlar, la duda que te paraliza y el miedo que te frena. Es el momento de elegir.
Porque al final del día, ¿qué es lo MEJOR que podría pasar si eliges transformar tu vida? Quizás descubras que esa versión más grande y libre de ti siempre estuvo allí, esperando a que le dieras permiso de brillar.
Lorena Ladera
@namastemoveom
